Tanto a la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila Olmeda, como a su esposo, Carlos Torres Torres, quien se desempeña como coordinador de Proyectos Estratégicos del Ayuntamiento de Tijuana, les fue revocada la visa de no migrante por parte del gobierno de Estados Unidos.
La noticia fue compartida por los mismos funcionarios a través de sus redes sociales el día sábado, ambos expresaron estar tranquilo y seguros de que no hay investigación alguna en su contra. El primero en ser notificado fue el coordinador Torres, quien dijo:
“Mi conciencia está tranquila y estoy seguro de que se resolverá la situación de manera favorable. En la actualidad, la aplicación de estos criterios administrativos se ha vuelto cada vez más común, y como tantos otros, estoy incluido en ese universo”, manifestó Torres.
Tan solo cinco horas después, la gobernadora de Baja California anunció que también ella era parte de las medidas.
“En estos días he sido testigo, una vez más, de lo que verdaderamente significa el amor, la entereza y la lealtad. Mi esposo, Carlos, ha enfrentado una situación, y como en toda vida compartida, esa circunstancia también me ha alcanzado.
Ambos se dijeron seguros de que la situación “se va a aclarar satisfactoriamente para ambos”.
Finalmente, Torres Torres explicó que la razón de compartir la información es para evitar las especulaciones y “limitar el uso malintencionado de esta situación por parte de adversarios políticos. Créanme: se trata de personas sin límites ni escrúpulos, dispuestas a convertir cualquier hecho en calumnia si creen que les dará ventaja”.
